Si eres empresario o administrador de una sociedad, sabrás que cerrar una empresa con deudas no es una tarea fácil. Se trata de un proceso complejo que implica tomar decisiones difíciles y asumir responsabilidades legales y financieras.

Por eso, en este artículo te vamos a explicar qué pasa si una empresa no puede pagar sus deudas o cómo cerrar tu empresa con deudas de forma ordenada y eficiente, siguiendo los pasos y consejos que te damos a continuación.

¿Por Qué Considerar Cerrar una Empresa con Deudas?

Disolver una empresa con deudas no es una decisión fácil ni agradable, pero a veces es la única salida viable para evitar mayores problemas. Algunas de las circunstancias que pueden llevarte a tomar esta decisión son:

  • No hay suficientes ingresos para cubrir los gastos fijos y variables.

  • Hay dificultades para acceder al crédito o refinanciar sus deudas.

  • Tener un alto nivel de endeudamiento y no poder hacer frente a los pagos a proveedores, bancos, empleados, etc.

  • Acciones legales o retenciones de bienes por parte de los acreedores.

  • No hay perspectivas de recuperación o reestructuración.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el año 2022 se disolvieron 26.207 sociedades mercantiles en España. La mayoría de estas disoluciones se debieron a fusiones o causas económicas, como la falta de liquidez o la insolvencia.

Identificación y Evaluación de Deudas

Antes de cerrar una sl con deudas, es importante identificar y evaluar las obligaciones pendientes que tiene la sociedad. Para ello, se deben seguir los siguientes pasos:

  • Hacer un inventario de todas las deudas, incluyendo el importe, el plazo, el tipo de interés y el acreedor.

  • Clasificar las deudas según su naturaleza: comerciales (proveedores, clientes, etc.), financieras (bancos, préstamos, etc.), laborales (salarios, cotizaciones, etc.), fiscales (impuestos, sanciones, etc.) o sociales (seguridad social, pensiones, etc.).

  • Priorizar las deudas según su urgencia y su impacto: por ejemplo, las que pueden generar intereses de demora, recargos o embargos.

  • Conocer los derechos y obligaciones que tiene la empresa con cada acreedor: por ejemplo, si hay garantías personales o reales, si hay cláusulas penales o resolutorias, si hay posibilidad de negociar quitas o aplazamientos, etc.

  • La importancia de conocer las deudas de la empresa radica en que estas determinarán la forma y el procedimiento para cerrar la empresa con deudas, así como las consecuencias legales que se derivarán para la sociedad y los administradores.

Opciones Legales para Cerrar una Empresa con Deudas

Existen varias opciones legales para dejar morir una sociedad con deudas, dependiendo del grado de solvencia y liquidez que tenga la sociedad. A continuación te explicamos las más habituales:

Liquidación Ordenada

La liquidación ordenada es la forma más sencilla y rápida de disolución de una empresa con deudas. Consiste en vender todos los activos y bienes de la sociedad para pagar todas las obligaciones pendientes. Una vez que las cuentas están saldadas, se procede a la disolución y extinción de la sociedad en el Registro Mercantil.

Esta opción requiere que la empresa tenga suficientes activos para cubrir todas sus deudas, o que pueda negociar con los acreedores, quitas o condonaciones parciales.

Además, se debe hacer bajo la supervisión de profesionales que eviten el alzamiento de bienes o el fraude a los acreedores por parte del administrador.

Concurso de Acreedores Voluntario

El concurso de acreedores voluntario es un proceso judicial que se inicia cuando la empresa se encuentra en situación de insolvencia, es decir, cuando no puede pagar sus deudas a su vencimiento.

El objetivo del concurso es llegar a un acuerdo con los acreedores para reestructurar las deudas y salvar, o en su defecto, liquidar la empresa con deudas de forma ordenada. El concurso de acreedores voluntario tiene varias ventajas para la empresa y los administradores:

  • Permite paralizar las acciones judiciales o ejecutivas de los acreedores, así como los intereses de demora o los recargos.

  • Permite negociar con los acreedores quitas (reducciones del importe de la deuda) o esperas (aplazamientos del plazo de pago).

  • Permite exonerar a los administradores de responsabilidad por las deudas sociales, siempre que hayan actuado con diligencia y hayan solicitado el concurso dentro del plazo legal.

Para solicitar el concurso de acreedores voluntario, se debe presentar una solicitud ante el juzgado mercantil competente, acompañada de una serie de documentos que acrediten la situación económica y financiera de la empresa. El juez nombrará un administrador concursal que se encargará de supervisar el proceso y velar por los intereses de los acreedores.

Ley de Segunda Oportunidad

La Ley de Segunda Oportunidad es una norma que permite a las personas físicas (autónomos o particulares) liberarse de sus deudas cuando no pueden pagarlas.

Para acceder a este beneficio, se exigen algunas condiciones, como demostrar honestidad, no haber cometido delitos económicos y haber buscado una solución negociada con los acreedores.

Puede ser una solución para los empresarios individuales que busquen cómo cerrar una empresa sin pagar, o para los administradores o socios que han avalado personalmente las deudas sociales. El proceso consta de dos fases:

La fase extrajudicial: se trata de negociar con los acreedores un plan de pagos que sea viable para el deudor, con quitas o esperas. Esta fase se realiza ante un mediador concursal, que es un profesional designado por el Ministerio de Justicia.

La fase judicial: si no se logra un acuerdo extrajudicial, se solicita al juez el beneficio de exoneración del pasivo insatisfecho (BEPI), que consiste en la cancelación total o parcial de las deudas que no se han podido pagar. El juez valorará si el deudor cumple los requisitos y si ha pagado al menos una parte de sus obligaciones.

La Ley de Segunda Oportunidad tiene algunas desventajas, como la dificultad para acceder al crédito en el futuro, la publicidad del proceso en un registro público o la posibilidad de revocación del beneficio si mejora la situación económica del deudor.

Si estás pensando en disolver una sociedad con deudas y quieres encontrar una solución financiera que te ayude a salir de esta situación, te recomendamos que conozcas Bravo.

Preparación para el Cierre: Aspectos Financieros y Legales

Antes de liquidar una sociedad limitada con deudas, es importante que analices tu situación financiera y legal con detalle. Para ello, te recomendamos estos consejos:

  • Identifica todas las deudas que tienes y quiénes son tus acreedores. Haz un listado con los importes, los plazos y las condiciones de pago de cada una de ellas.

  • Revisa los contratos y acuerdos que tienes con tus clientes y proveedores. Comprueba si hay alguna cláusula que te obligue a cumplir con algún compromiso o que te imponga alguna penalización en caso de incumplimiento.

  • Busca una solución alternativa al cierre. Antes de tomar la decisión definitiva, intenta negociar con tus acreedores una quita o un aplazamiento de las deudas, solicita un préstamo o una línea de crédito a un banco o a una entidad como Bravo, o valora la posibilidad de vender tu empresa o tu unidad productiva a otro empresario.

  • Asesórate por profesionales. Dejar morir una sociedad limitada con deudas es un proceso complejo que tiene implicaciones legales y fiscales para ti y para tu empresa. Por eso, es conveniente que cuentes con el apoyo de un abogado y un asesor financiero que te orienten y te ayuden a realizar los trámites necesarios.

Si se aprueba el plan de pagos, la empresa podrá seguir funcionando mientras cumple con sus obligaciones. Si se opta por la liquidación, la empresa se extinguirá y se repartirá el dinero obtenido entre los acreedores según el orden establecido por la ley.

El cierre de empresa por falta de liquidez es un proceso complejo y delicado que requiere de una buena planificación y asesoramiento.

Antes de tomar esta decisión, es conveniente explorar otras alternativas que permitan salvar el negocio o al menos reducir el impacto económico y personal que puede suponer el cierre.

Si estás buscando una manera efectiva de salir de tus deudas, puedes contar con Bravo. Bravo ayuda a personas mediante programas de ahorro personalizados, diseñados para ayudarte a gestionar y superar tus deudas de manera eficiente y adaptada a tus necesidades personales, además con la posibilidad de ofrecerte un préstamo.

compartir:

no-imageno-imageno-imageno-image
Quieres recibir una propuesta para liquidar tus deudas y acceder a un crédito, cuéntanos más detalles:

C. de Velázquez, 50, planta 4º, 28001 Madrid, España. Sitio 100% seguro. Tu información es confidencial y está completamente protegida por certificados de seguridad.

go Bravo ® Todos los derechos reservados